Un intercambio teórico, el segundo que se realiza, de mujeres líderes de las religiones de ascendencia africana tuvo lugar en La Habana los días 25, 26 y 27 de septiembre de 2011.
Las jornadas científico culturales contaron con la participación de reconocidos intelectuales, artistas, profesionales e investigadores, hombres y mujeres, que acompañaron a las féminas que profesan religiones de origen africanas, tales como la Regla Ocha, el Voudu y otras.
Contemplaron las intervenciones de los participantes ejemplos personales y sociales de las prácticas, conservación y ejecución de ritos, costumbres, rezos, cantos, músicas y ceremonias de las distintas manifestaciones religiosas.
Nancy Pullez Méndez, premio mundial de la UNESCO en el 2009, habló sobre sus experiencias al frente del proyecto El Templo de Oyá, en La Habana Vieja, fundamentalmente de los niños, y con lo cual alcanzó el reconocimiento de la organización internacional.
Otra manifestación del trabajo de mujeres religiosas fue la presentación de Graciela E. Pardo Sarracent y sus experiencias al frente del proyecto comunitario De África tengo y del Caribe soy, desarrollado en Alamar, Habana del Este, de una alta expresividad del legado de sus ancestros africanos.
La segunda de estas exponentes habló sobre la presencia barbadense en el municipio Baragua, en la provincia de Ciego de Ávila, quienes cargaron consigo su cultura, sus tradiciones y que son de gran arraigo entre sus descendientes quienes las mantienen hasta nuestros días.
Igualmente descendiente de barbadenses, la destacada defensora de la práctica del cricket en Cuba, Leona Ford, habló sobre la instauración de este deporte por los inmigrante de ese país y la permanencia hoy en día de su práctica en diversas zonas.
Raimundo Gómez Navia presentó el resumen LA MUJER DESCENDIENTE DE HAITIANOS EN CUBA: PORTADORA DE LOS VALORES DE SUS ANCESTROS, componente de su preparación para un Doctorado sobre los haitianos en la historia y realidad cubanas, donde expone cómo la mujer de esta etnia preserva y afirma su identidad étnica y cultural, los hábitos sociales, las manifestaciones de la participación activa en el mundo y las actitudes individuales que conformaron el estilo de vida y de trabajo de sus ancestros, lo cual se mantiene hoy día por el conglomerado humano que forman lo que se denomina como comunidad haitiana en Cuba.
Eliseo Llorente mostró en varias oportunidades los ritmos, cantos y músicas de diversos países del Caribe, cuya procedencia es africana con una fuerte asimilación en esta región del mundo.
Lázaro Tompson expuso en dos oportunidades los legados históricos, religiosos y éticos de los ancestros africanos presentes en los descendientes de ellos en el Caribe, y que tiene su manifestación no sólo en Cuba, sino en Haití, Brasil y demás países del área donde se encuentran.
En la primera jornada disfrutaron de un concierto por la paz, cargo del Grupo Femenino Ovni Batá, sobre cuya agrupación, única en el país, se presentó un documental y su directora, Eva Despaigne evacuó las interrogantes de los asistentes.
También se contó con una exposición permanente de muñequería, atributos y otras piezas relativas a las religiones de origen africano en Cuba, cuya confección estuvo a cargo de las artesanas Ana María Aldana Suárez y su nieta Aymeé Quintana Aldana.
En el cuerpo de este sitio se insertan los textos completos de algunos de las ponencias expuestas en este Segundo encuentro.
